sábado, noviembre 20

Después de éste instante
ya solo sentiré el sabor amargo en la boca,
el cansancio en la lengua
y aquel nudo en la garganta tras una fila de palabras
que se aparcaron rotas
allí donde la verdad se muerde para que no duela más.

Lo sé.
El tiempo borrará mi nombre de tu memoria
mi rostro
mis caricias
tal vez no prevalezca nada que te haga recordar
por eso aquí
ahora
me quedo con el eco de tu voz
y tus manos en las mias
me quedo con ésta noche llena de desaciertos
sin estrellas que cumplan deseos
y me aferro al último hilo de felicidad prendido de tus brazos
multiplicando cada segundo
para que me dures por toda la eternidad que me espera
alejada de ti.


No hay comentarios:

Publicar un comentario